Me contaba mi abuelita, que hace muchos años, allá por los tiempos de la revolución decía ella, la vida de la gente, era bien distinta. Mucha gente se hacía a la ‘bola’, que así le decían cuando se iban con Zapata, o con el general Villa, que para luchar con ellos por la tierra. Platicaba mi abuelita, que hasta los niños se iban, once o doce años tenían, pero que ellos también ayudaban. Ella se acordaba de Lauro, el hijo de la partera. Al contarme, mi abuela decía “!pobrecita María!,! como lloró cuando se fue su chamaco! Cuando paso Zapata por el pueblo, al chamaco se le puso que se iba con él, María le decía que no, que estaba muy chiquillo, pero Lauro decía que el ya era bien hombre, que le podía ayudar al general”, contaba que el mismo se acercó al general, para decirle que le podía cuidar el caballo, que le alistaría sus botas y sus carabinas, que aprendía bien rápido. Me decía mi abuela, que la pelea estaba difícil, que no solo se iban los hombres, también las mujeres, que los acompañaban en la guerra, les preparaban la comida y que cuando se ponía feo, hasta agarraban también las armas, que se cansaban pero que eran leales al general y a su hombre, así decía mi abuela. Por eso, el general aceptó, y se llevó a Lauro, porque como decía mi abuela “ hacían falta manos pa’ la lucha y ‘pos ni modo, ahí va Lauro, que anduvo buen tiempo con el general, cuidándole las espaldas”
Muchas veces, al participar en platicas con amigos o familiares, me descubro a mi misma usando frases como “mi abuelita me contaba…” “como diría mi abuelita…”. Entonces me doy cuenta del significado y la influencia que sus enseñanzas, sus pláticas y sus historias, han ejercido en mi vida, y cómo lo que ella me contaba, sufre una acomodación en mis experiencias de vida actual. Por lo que identifico en la transmisión oral, una experiencia exquisita y rica oportunidad de compartir conocimientos, contrastar ideas y puntos de vista, acercamiento a la realidad histórica desde versiones y personas diferentes, además de permitir como lo menciona la investigadora Ana Maria de la O Castellanos, una vinculación entre la escuela y la comunidad, cuando los alumnos realizan entrevistas, donde los saberes históricos de las personas mayores son tomados en cuenta.
Por tanto, creo que si logramos que los alumnos, a través de la narración, real o ficticia, pueda experimentar los sucesos o los personajes, de una manera mas vívida, el aprendizaje de la historia podrá ser mucho más significativo e interesante. Además podrán descubrir, que la historia puede ser contada de muchas maneras, y que como la realidad actual, puede tener muchas aristas, donde la verdad o la mentira se vuelve relativa y puede tener muchas representaciones, por lo que entonces el sentirá la necesidad de hacer sus propios análisis y juicios y esto puede contribuir, al desarrollo del pensamiento histórico y a la formulación de opiniones y decisiones en relación a la historia y a su presente mismo.
Profra. Paulina de los Santos Martínez
Les agradezco las opiniones o criticas que puedan hacer a mi trabajo. Saludos!
